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Tailtiu, es el nombre de una diosa de la mitología celta irlandesa. Se asocia con el vigor, la fuerza, la resistencia y el ímpetu. Si se traduce su nombre al sentido así, significa “Tierra Grande”. Cuenta la historia de historia legendaria que fue ella quien quitó los árboles mucho más grandes para que las tierras pudiesen ser labradas y cosechadas.
Es un tipo de diosa que está relacionada con la cosecha, en concreto con el trigo, su influencia para el nacimiento del trigo y la cosecha del mismo era alta, altísima. En aquella época, la agricultura y el trigo era la base sólida de la alimentación y también de la economía, de ahí se puede deducir la importancia que tenía esta diosa.
Origen
Según el Libro de las Invasiones, Tailtiu era la hija del rey de España y de la esposa de Eochaid mac Eirc, último Fir Bolg Gran Rey de Irlanda, quien nombró su capital después de ella (Telltown, entre Navan y Kells). Ella subsistió a la invasión de los Tuatha Dé Dánann y se transformó en la madre adoptiva de Lugh. Se dice que Tailtiu murió de agotamiento tras adecentar los campos de Irlanda para la agricultura. Lugh estableció un festival de la cosecha y los juegos lúgubres Áenach Taillteann, en su honor, el cual continuó celebrándose en fecha tan tardía como el siglo XVIII.
El primer Áenach Taillteann, después la Feria Taillten, se festejó en Telltown. Históricamente, fue un tiempo para concursos de fuerza y capacidad y favorecedor para contraer matrimonios y hospedajes de invierno. La paz se declaró en el festival y las celebraciones religiosas se llevaron a cabo allí mismo. Puntos del festival sobreviven en las celebraciones de Lughnasadh, y fueron revividas como los Juegos Telltown durante un período en el siglo veinte.
Diosa celta de la tierra
Tailtiu es de la tierra, viene de la tierra y regresa a la tierra para volver nuevamente. Ella prepara la tierra, labra la tierra, crea la tierra y hasta hace que la tierra sea buena. Sus sacrificios para que la tierra fuese de máxima calidad y el pueblo celta pudiese labrar, son sacrificios que fueron valorados y premiados con cientos y cientos de rituales que perviven hoy en día Ella es abundancia, también es fertilidad, nacer, morir y volver a renacer pasa por la diosa Tailtiu, una diosa que da una gran lección de vida, de filosofía mediante la iniciativa de un período perpetuo.
Lección de la diosa Tailtiu
Recuerda la importancia del esfuerzo, de la perseverancia, de aquello que conseguimos con nuestras manos. Marca el camino para comprender el sacrificio que hay que realizar para cuidar de la madre tierra en el sentido moderno de los ecologistas. La tierra, la naturaleza nos brinda todo y más allá de que como humanos no entendemos cuidarla, ella nos sigue cuidando.
Tailtiu sigue siendo llamada por una cantidad enorme de creyentes en el momento en que celebran una cosecha, es una manera de agradecer a la diosa de la tierra los frutos que nuestra tierra continúa dando. Es una parte de las primeras triadas y recuerda el poder de la naturaleza y la fuerza de la misma.
Una diosa que colecciona varios admiradores. Por otra parte, las diosas celtas tienden a resistirse al sincretismo. Sulis Minerva pertenece a los pocos casos atestiguados de emparejamientos de una diosa celta con su análoga romana. Las dedicatorias a Minerva son recurrentes tanto en Gran Bretaña como en Europa continental, comúnmente sin ningún título o interpretación celta.
